El criptojacking, aunque no tan intrínsecamente malicioso como otras formas de malware, es un problema que puede causar graves daños a largo plazo, tanto a los dispositivos informáticos personales como a los procesos de TI a gran escala.
El criptojacking se refiere al acto de implantar malware que utiliza silenciosamente los recursos informáticos de la víctima en segundo plano para realizar criptominería no autorizada. Como la criptominería emplea intensivamente el hardware, puede causar problemas de rendimiento en el dispositivo de la víctima.
El criptojacking suele llevarse a cabo usando un malware instalado en su dispositivo o ejecutándose como un proceso basado en la web cuando visita una página determinada. De hecho, algunos anuncios podrían contener scripts que usen sus recursos para minar criptomonedas durante esa sesión de navegación.
Los efectos del criptojacking se limitan al rendimiento y la vida útil. No obstante, en el contexto de operaciones empresariales o infraestructura complejas, puede perjudicar sus sistemas. Puede afectar la prestación de servicios y, por extensión, la experiencia del usuario. También puede vulnerar los procesos internos. Esto dificulta el acceso de las partes interesadas legítimas a la información crítica.
Estas son tres señales a las que debe prestar atención y que pueden ayudarle a determinar si ha sido víctima de criptojacking:
Dado que la criptominería no autorizada es un proceso intensivo, provoca una tensión adicional en el sistema. Esto resulta en ralentizaciones y reducciones del rendimiento de forma aleatoria. Si hay suficientes tareas simultáneas, la adición del software de minería podría provocar el bloqueo total del sistema. Si su dispositivo empieza a funcionar mal sin explicación alguna, esto podría apuntar a la presencia de un malware de criptojacking.
El criptojacking puede hacer que su dispositivo se sobrecaliente debido al aumento de la tensión en el hardware. Su dispositivo puede empezar a sobrecalentarse incluso cuando no está realizando una tarea especialmente exigente o cuando está visitando una página web en particular. Esto es realmente problemático si se tiene en cuenta el hecho de que el criptomalware suele pasar desapercibido durante largos periodos de tiempo. Estos problemas de sobrecalentamiento pueden causar daños permanentes en el hardware de su dispositivo.
Esté atento a los picos repentinos en el uso de CPU y GPU, sobre todo durante tareas en las que esto no debería estar ocurriendo. Esto podría indicar que hay algunos procesos en segundo plano desconocidos que podrían ser criptomalware. Sin embargo, este suele camuflarse como un proceso legítimo. Lo anterior dificulta su detección. Algunos tipos de criptomalware también pueden reconocer cuando abre el administrador de tareas y detener sus operaciones hasta que lo cierre.
El criptojacking tiene como objetivo aprovechar los recursos de tu sistema de manera silenciosa y prolongada, lo que lo hace difícil de detectar. Afortunadamente, herramientas antimalware como Malwarebytes pueden ayudarte a identificar y eliminar este tipo de malware.
En el peor de los casos, podrías necesitar reiniciar tu sistema y restaurarlo desde cero. Sin embargo, si has realizado una copia de seguridad de tus datos, esto no debería ser un gran inconveniente. Evita visitar sitios web sospechosos, asegúrate de tener un buen bloqueador de anuncios y mantente alerta ante los tres signos de criptojacking que hemos mencionado. Aunque no es posible garantizar una protección 100% infalible, seguir estos consejos te ayudará a mantener tu dispositivo seguro y a detectar el criptomalware a tiempo.
Tres signos evidentes de que ha sido víctima de criptojacking
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